"ISAIAS 1:3" ES UN COMPARTIR DE BISHOP K.C. PILLAI, QUE HERMOSO ES APRENDER DE ALGUNOS ANIMALES DE LAS TIERRAS BÍBLICAS Y SOBRETODO ES HERMOSO APRENDER DE AQUELLOS ANIMALES Y AHORA NOS DEJARÁN UNA GRAN LECCIÓN, PERO ANTES DE PASAR AL COMPARTIR, QUERÍA RECORDAR UNA FRASE DE UN AUTOR ANÓNIMO QUE DICE:
- "No hay peor animal, que el hombre cegado en su entendimiento"
AUN LOS ANIMALES ACUDEN A SUS INSTINTOS PARA SOBREVIVIR, PERO UN HOMBRE CEGADO EN ENTENDIMIENTO MUERE EN SUS PROPIOS IDEALES.
PERO MUCHAS GRACIAS SEAN DADAS A DIOS, QUE NOS DEJÓ SU MARAVILLOSA PALABRA, PARA QUE EL HOMBRE Y LA MUJER SE NUTRAN DE ELLA, Y ASÍ CONOZCAMOS DE DONDE VIENE EL MEJOR CONOCIMIENTO, NUESTRO ALIMENTO DIARIO. Y ESTO VIENE DE DIOS, QUE ES QUIEN NOS ALIMENTA CON LO MEJOR DE SUS RECURSOS.
COMO CREYENTES, COMO HIJOS DE DIOS DEBEMOS RECONOCER Y VOLVERNOS SIEMPRE DONDE DIOS ESTÁ, PARA QUE ÉL NOS CUIDE, NOS ALIMENTE Y NOS GUÍE.
DISFRUTEN DE ESTE HERMOSO COMPARTIR:
- Isaías 1:3
El buey conoce a su dueño, y el asno el pesebre de su señor; Israel no entiende, mi pueblo no tiene conocimiento:
Imagínense "El buey conoce a su dueño, y el asno el pesebre de su señor; pero Israel no entiende, mi pueblo no tiene conocimiento.”
Al burro se le conoce como un animal estúpido, sin embargo tiene más sentido común que los seres humanos, puesto que el burro puede fácilmente encontrar el camino de vuelta al pesebre de su señor. Así que el burro no es tan estúpido como el pueblo de Israel, que no se volvía para Dios – no tenía entendimiento.
Isaías está hablando de una manera muy típica Oriental. Les está diciendo a los hijos de Israel lo duros de corazón que eran. No se volvían para arrepentirse. En el Oriente a los bueyes se les lleva a las tierras altas por la mañana. El pesebre es un lugar donde se guardan los burros. Existen unos cuantos muchachos en cada aldea o ciudad contratados por sus ciudadanos que se dedican a cuidar de todos los animales. Se dirigen diariamente a cada una de las casas para reunir todo el ganado y lo pastorean subiéndolo hasta los montes. Las personas en el Oriente dicen que las vacas se encuentran siempre en la calle porque las ven pasar cuando ellos están reuniendo a los animales por la mañana y los conducen a través de las calles. Cerca de las seis de la tarde regresan. Las vacas están por las calles solo en esas dos ocasiones. Los muchachos que están al cuidado solo traen los animales hasta la entrada de la aldea y después se van a su casa. Los burros y los bueyes entonces, desde allí se dirigen por sí cada uno a su casa de origen. Conocen bien el camino. Espiritualmente hablando, los bueyes y asnos regresan y se vuelven a su señor que los alimenta, sin embargo Israel no conoce el camino de vuelta hacia a Dios.
Los animales tienen el suficiente sentido común para dirigirse a sus pesebres y establos, pero las personas no tienen suficiente sentido común para volverse a su Dios. Con las ovejas sucede lo mismo. El pastor saca al rebaño y apacienta las ovejas, entonces el carnero predominante reúne y guía a los demás carneros cerca de las ovejas – el pastor no cuidar ni apacentar los carneros que se mantienen al lado de las ovejas. Las ovejas las cuida el pastor y el carnero predominante cuida de los carneros.
El asno conoce el pesebre de su amo. La mayor parte de los propietarios del Oriente se ocupan del ganado y de labrar sus propias tierras o campos. De 75 al 90 por ciento de ellos viven cultivando su propio terreno. Casi todas las personas en India de las castas más altas gobiernan su propia casa y tierras cedidas en herencia de padres a hijos. Practican la “agricultura concentrada” – cada familia cultiva lo que precisa para vivir. Normalmente no viven en la granja sino que se trasladan hasta allí diariamente para trabajar, llevando consigo animales y los materiales que precisen.
Los búfalos, bueyes y vacas son guardados en establos de la casa donde viven en la aldea. El sitio donde comen en sí, se saca de dos largas tiras de piedra que forman una cavidad entre ellas donde se esparce la hierba para que los animales coman.
Muchas personas pobres trabajan para el propietario de la granja y viven en cabañas de barro al lado del establo. Cuando hay un nacimiento, la mujer se tiende en el comedero y es allí donde da a luz junto a la hierba. Es una práctica común entre los pobres.
El lugar donde son guardados los burros es el pesebre. Todas las mañanas, un grupo de jóvenes “vaqueros” contratados por la comunidad apacienta y cuida de los animales. Vienen y reúnen a los animales, y entonces los conducen por las calles, reuniendo de entre todas las casas – tal vez unos 2000 animales, y las pastorean el día entero. Por la tarde los vaqueros volverán a traer los animales hasta las puertas de la ciudad y cada animal se dirige por sí a su pesebre o establo. Ninguno de ellos se equivoca. Solamente las personas se olvidan del camino a casa. Nosotros deberíamos saber que nuestra provisión y seguridad se encuentra en el establo de nuestro Maestro. El asno no se para al lado de su pesebre rezando, “Señor; Señor, mándame algo para que coma aquí” ¡No! Solo los humanos hacen eso.
Nuestra parte es dirigirnos al pesebre, y la parte que le toca a Dios es apacentarnos y cuidar de nuestras necesidades. Cristo Jesús es ahora el pesebre de todo el mundo. Toda la humanidad puede encontrar la salvación, la satisfacción, el sustento, la paz, etc. en él.
¡Los hijos de Israel estaban andando en sus propios caminos otra vez! Y Dios les habló por medio del profeta y lo envió para traer de vuelta a Su pueblo a casa. Cuando Israel andaba errante, Dios les envió a Isaías, que les refirió Isaías 1:3.
BISHOP K.C. PILLAI
QUE TENGAN UN HERMOSO Y GRAN DÍA, QUE DIOS LOS SUPER BENDIGA EN TODO Y NUNCA SE OLVIDEN DE H.E.L.
OTRA LECCION PARA LA VIDA DE ALIENTO Y LA VIDA ESPIRITUAL